El viernes 7 de junio, nuestra Vicaría Zona Centro celebró 60 años de vida con un renovado compromiso para ser portadores de la Luz bajo la guía del Sagrado Corazón de Jesús, devoción a la que fue consagrada en su origen.
En la Parroquia El Sagrario, se reunieron laicos, trabajadores y ex colaboradores para celebrar la Eucaristía, en compañía de Mons. Álvaro Chordi, nuestro Vicario; el P. Sebastián Vial, párroco in solidum de San Pablo, San Saturnino, Sagrado Corazón de Jesús y Asilo del Carmen; el P. Javier Manterola, vicario de la Zona Centro entre 2006 y 2011, y el padre Erick Hauck.
La celebración comenzó con la renovación de nuestro compromiso ante la imagen del Sagrado Corazón de Jesús en la Catedral Metropolitana. Luego, en procesión nos acercamos hasta los pies de la Virgen del Carmen de El Sagrario.
Reunidos en torno al altar, se procedió a la liturgia de la Palabra y luego, en su homilía, Mons. Chordi destacó que por primera vez esta celebración se abre a su entorno.
“La Vicaría somos todas las comunidades a las cuales los trabajadores, de la Vicaría, están entregados en cuerpo y alma. Y agradecemos su servicio a los de hoy y a los de ayer, especialmente a los vicarios que me antecedieron en esta labor”, dijo Mons. Chordi.
A los presentes recordó que “desde la espiritualidad del Sagrado Corazón nos alimentamos del amor de Dios para, posteriormente ir a la ciudad de Santiago. Elevándonos hasta el corazón de Dios atraemos allí a nuestros hermanos”.
“La única manera que tenemos de demostrar a Dios que lo amamos es amando al prójimo. ¿Con qué amor amas tu al prójimo? Con el amor con que Dios mismo nos ama. Un amor firme, constante, que acoge, que soporta, que perdona, que ablanda, que suaviza, que enternece y que hace moldear los corazones”, enfatizó el Vicario.
Por último, oró para que nuestros corazones “se impregnen de la dulzura, de la paciencia y de la comprensión del Corazón de Jesús” y desde allí “creamos juntos comunidades más vivas y de evangelización más fraternas y samaritanas”.
Para la bendición final, los trabajadores de la Zona Centro se ubicaron a los pies del altar para renovar su compromiso en torno a un gran cirio. Desde allí, esperan ser luz en medio de la noche de la gran ciudad.
Revisa todas las imágenes AQUÍ.